Las alergias e intolerancias alimentarias están al pie del día, ya sea porque cada vez hay más diagnósticos o porque la situación actual conlleva a un mayor estrés que, a su vez puede ocasionar intolerancias alimentarias.
Hoy en día, muchas personas se sienten perdidas al no saber qué comer o qué comprar tras ser diagnosticadas con estas intolerancias, por ello, tener un profesional que les guíe para poder llevar una alimentación adaptada a sus necesidades es muy importante para evitar cualquier tipo de carencia nutricional a largo plazo, tanto si presentas una alergia como si te han diagnosticado una intolerancia o un SIBO.
En el caso de que fuera una intolerancia, es importante analizar a qué se debe, ya que las intolerancias suelen ser secundarias a otra patología intestinal.
La dietoterapia es una parte de la nutrición que se encarga del tratamiento de diferentes patologías mediante la alimentación.
A través del servicio de nutrición adaptado a intolerancias, alergias y SIBO podemos ayudarte a mejorar tu salud a través de una alimentación saludable y a resolver tus dudas acerca de qué elecciones alimentarias son las más adecuadas para tu patología.
Podemos ayudarte con las siguientes alergias e intolerancias:
- Intolerancia a la fructosa y/o sorbitol: en la mayoría de casos la intolerancia a la fructosa es secundaria a un daño intestinal, especialmente en el intestino delgado. Conocer cuáles pueden ser las causas nos puede ayudar a erradicar el problema y hacer el correcto tratamiento nutricional. Una correcta planificación nutricional puede reducir y paliar todos los síntomas y, por tanto, revertir la intolerancia.
- Enfermedad inflamatoria intestinal (EII), Síndrome del intestino irritable (SII) y SIBO: a través de una dieta baja en FODMAPs pautada y personalizada podemos ayudarte a mejorar los síntomas característicos de estas alteraciones gastrointestinales como son las alteraciones en las deposiciones, distensión abdominal, gases o dolor abdominal.
Nuestro servicio no solo incluye una intervención dietética, también te aconsejamos sobre las pruebas necesarias para conocer más patología y poder ayudarte desde un abordaje más completo.
- Intolerancia a la lactosa: es una de las intolerancias más frecuentes en los últimos años, puede ser hereditaria o inducida tras dejar de consumir lácteos. La intervención nutricional no es quitar por completo los lácteos, sino buscar los que mejor se adapten al paciente siempre y cuando no haya síntomas.
- Enfermedad celíaca o sensibilidad al gluten no celíaca: el gluten es una proteína presente en el trigo, cebada, centeno, avena, espelta y kamut. Una persona con celiaquía provoca una respuesta inmune al ingerir gluten, ésta a su vez provoca inflamación a nivel intestinal produciendo una malabsorción de nutrientes. Es importante hacer una correcta intervención nutricional lo antes posible para evitar mayor daño en el sistema digestivo a corto y largo plazo.
- Alergia a la proteína de la vaca: es una reacción de hipersensibilidad a la proteína de la leche de la vaca, que aparece especialmente en edades tempranas. Es importante realizar una buena pauta nutricional para sustituir correctamente los alimentos que pueden provocar alergia.
- Alergias a la proteína LTP: LTP son las siglas en inglés de » lipid transfer protein» que traducido al español significa PTL “proteínas transportadoras de lípidos», este tipo de proteínas se encuentran sobre todo en alimentos de origen vegetal, especialmente en frutas rosáceas como melocotón, albaricoque, manzana, ciruela, etc. En este caso es importante el trabajo del alergólogo junto con el nutricionista para valorar la alergia de ciertos alimentos del paciente y retirarlos de su dieta..
- Alergias a alimentos (frutos secos, leche, marisco, pescado, huevos, etc.): en este tipo de alergias es importante buscar alternativas saludables a estos alimentos para evitar carencias nutricionales.
En todas ellas buscamos mejorar la calidad de vida del paciente, orientarlo en qué alimentos puede y no puede comer, para así evitar o reducir lo máximo posible la sintomatología, buscando un correcto estado nutricional y facilitando un menú saludable para el paciente.
¿Cómo empezamos?
Paso 1: Primera visita
Para comenzar será necesario que acordemos una primera visita. En esa visita te realizaremos un cuestionario nutricional y un estudio de composición corporal donde mediremos porcentajes de grasa y musculatura, siempre que sea necesario, con el fin de obtener la mayor información. Con esta información, estableceremos los objetivos del tratamiento y elaboraremos un plan nutricional personalizado y totalmente adaptado a ti con el fin de guiarte en este proceso dónde, no solo encontrarás un menú diario, sino recetas y consejos prácticos para mejorar tu calidad de vida.
Por tanto, esta primera consulta incluye:
-Entrevista personal
-Anamnesis
-Estudio de composición corporal
-Dieta personalizada y adaptada a tus alergias y/o intolerancias
-Pautas nutricionales y herramientas necesarias para llevar a cabo tu dieta personalizada
– Recetas adaptadas a tus alergias y/o intolerancias
Paso 2: Visitas de seguimiento
Después de esta primera visita llevaremos a cabo un seguimiento del caso. La frecuencia de estas consultas de seguimiento, dependerá de tu caso, gravedad u objetivos marcados. Durante estas sesiones evaluaremos tus sensaciones, síntomas, composición corporal, datos bioquímicos y obstáculos surgidos.
Estas visitas de seguimiento incluyen:
-Estudio de la composición corporal
-Nueva dieta personalizada y adaptada
– Pautas nutricionales y herramientas necesarias para llevar a cabo tu dieta personalizada
Además en las visitas de seguimiento existirá un espacio dedicado a la resolución de dudas y obstáculos que hayan aparecido durante las primeras semanas.
Podemos ayudarte a llevar una alimentación saludable y a que te sientas mejor, tanto si padeces una alergia, una intolerancia alimentaria o SIBO.