A estas alturas de la película, imagino que ya sabes qué es la ansiedad… Pero bueno, vamos a hacer un repasito, que nunca viene mal.
La ansiedad es una respuesta innata de nuestra especie, que tiene como misión la supervivencia. Sí, sí, has leído bien, la supervivencia. Cuando sentimos peligro, el circuito de la ansiedad se dispara para que reaccionemos de la forma más eficaz para sobrevivir. Nos ayuda a reaccionar con más rapidez y reflejos, que corramos más rápido o que tengamos más fuerza antes una situación peligrosa.
Hasta ahí, todo bien. El problema es que ni nuestro cuerpo ni nuestra mente saben distinguir una amenaza real de una amenaza imaginaria, y es aquí donde se arma el jaleo, y bienvenida ansiedad.
En nuestra interpretación de lo que va a pasar, en nuestros pensamientos.
Por ejemplo: Si tenemos una entrevista de trabajo y pensamos que no somos suficientes, que seguro que no les vamos a gustar, que van a pensar que somos poca cosa… estamos cometiendo errores cognitivos que lejos de ayudar, nos van a desestabilizar. Nuestra amígdala va a interpretar la entrevista de trabajo como peligrosa y va a encender las alarmas: aumentará el ritmo cardíaco, nos dilatará las pupilas y estaremos hiper vigilantes. Y todo esto para nada, porque la entrevista de trabajo no es una situación peligrosa y no necesitamos todo este despliegue que desencadena un estado de ansiedad.
¿Qué tenemos que hacer?
Darnos cuenta de qué nos produce ansiedad y desde ahí comprender el por qué y buscar las soluciones.
Escribir suele venir fenomenal, porque nos hace ser conscientes de, ante una situación peligrosa, qué pienso, qué siento y qué hago, y desde aquí trabajar en la mejora de la ansiedad.
Muy recomendable el ejercicio físico para liberar endorfinas (antidepresivos gratis y naturales) y bajar el cortisol (hormona del estrés y la ansiedad, que en concentraciones altas es perjudicial para la salud).
El sueño es una de las primeras cosas que nos falla cuando tenemos ansiedad, así que muy importante regularlo cuanto antes.
Y como no, hablar de la alimentación. Cuidar nuestra nutrición es una de las mejores formas de aportarnos autocuidado, y eso, es el mejor antídoto para combatir el estrés. Nuestro cerebro puede estar en estado de alerta si se encuentra en un estado de desnutrición.
Cuando tenemos ansiedad podemos encontrarnos con la alimentación emocional, y aquí también entra el cómo me cuido y cómo me regulo. La comida puede ser un medio para regular la ansiedad, pero no debe de ser el único. Por eso, si sientes que la alimentación es tu única vía para gestionar esta alimentación emocional, ¡pide ayuda!
En terapia trabajaremos el pasado, presente y futuro, ayudándote a entender el pasado, regular el presente y organizar el futuro.
Ahora… ¡atentos!
En el Centro de Nutrición y Psicología Laura Jorge vamos a realizar un taller presencial donde aprenderéis a entender y gestionar la ansiedad. Puntos que se van a trabajar en el taller:
- Conceptos básicos
- Como afecta al organismo
- Herramientas para entenderlo
- Pautas para gestionarla
- Ansiedad y alimentación
Será el próximo viernes 21 de octubre a las 18:30 horas en la clínica. Un taller ideal para todas aquellas personas que desean mejorar y encontrar un espacio de bienestar.
Si estáis interesados podéis poner en contacto con nosotras en contacto@laurajorgenutricion.com
¡Nos vemos pronto y que tengáis un feliz día!
Equipo LJ.